domingo, 20 de septiembre de 2015

Carta a José




Querido Jo,

¿Sabes lo cuan orgullosa me hace sentir que sea tu hermana? Cuantas veces nos hemos abrazado con nuestros padres cuando los tiempos eran difíciles y tener un abrazo familiar era  saber que no estábamos solos, que siendo cuatro y no uno las fuerzas llegarían para contagiarnos a cada uno de nosotros, ahora que el tiempo ha pasado y estas por cumplir dieciséis te puedo decir que eres el mejor hermano y chico que conocí.
Si pudiera regalarte algo en tu día, creo que sería el poder de hacer las cosas bien en este momento, que siempre des una mano al que lo necesita, que no tengas miedo de dar tu nobleza , que aunque los caminos y las lecciones de la vida sean duras siempre hay la posibilidad de encontrar una solución mientras el viento sigue soplando y el sol brille como lo hace todos los días, nunca dudes de tu valía y tu capacidad de ser brillante, eres genial tal y como eres, guarda el control con las situaciones que no puedes manejar, respira hondo y sonríe. Es cierto el secreto que escuchamos todos los días en el desayuno, ¿lo sabes verdad? Estoy segura que sí, es el de dar gracias por tener un día más de vida y poder dar algo bueno al mundo. No tengas miedo de equivocarte y luego pedir perdón, siempre se agradecido con hechos y no con muchas palabras, refúgiate en Dios, él es tu centro y te protege hasta el final de los tiempos. Contagia siempre que puedas tu magia, tu sonrisa. Recuerda que la palabra no, también es válida. Que los que te quieren están ahí en los momentos más difíciles y más bonitos. Que tu familia siempre estará allí, que aunque pasen los años y encontremos en nuestros padres un par de canitas no muy verdes, podremos siempre escucharlos, dejarnos guiar por su sabiduría y al final ellos en su sabiduría nos darán el poder de tomar decisiones, porque siendo humanos y nos equivoquemos cien veces hay novecientas veces más para levantarse.
Me gustaría que fueras correspondido siempre en el amor, pero tendría que tener una varita mágica para que eso siempre suceda, algunas veces te iras con el corazón un poquito resquebrajado y  entre las manos, debes aprender a perder, otras tendrás que decidir y alguna única vez y con certeza sabrás que la chica que tienes al frente es la que te ama tal y como eres, es tu amiga, tu compañera en los momentos de profundos aprendizajes y luego de un largo recorrido podrán seguir siendo los mismos compañeros y amigos pero esta vez teniendo más sabiduría cada uno, de igual manera que el amor es un regalo de la vida, debes estar siempre preparado, guardar la calma y respetar el tiempo que es el que tiene todas las respuestas. Ten siempre paciencia. No aceleres las cosas. Cuentas siempre conmigo y siempre estaré allí para ti. Nunca te rindas,  lucha por tus sueños, intenta ser feliz, enfócate en lo positivo, no dejes que nadie te haga pedazos, recuerda que solo tenemos una vida y está hecha para que la vivas, aprende siempre de lo bueno, recuerda que siempre todos nos equivocamos y un día también lo harás, aprende a  perdonar, no apliques nunca la violencia, todo se puede decir con tranquilidad, no desprecies al que es diferente, no grites, no te burles del dolor ajeno, recuerda que todos estamos aprendiendo, sigue intentado hasta el final, recuerda que eres genial y eres muy importante, tienes siempre todas las herramientas para salir adelante.