miércoles, 14 de noviembre de 2012

Días en Lima.



Estoy Lima. Viaje de improvisto. Mi madre se venía por un chequeó medico. El dolor que sufría era insistente. Agudo. Arduo. Nos pasamos los días en los hospitales. Buscando segundas opiniones. Haciéndose exámenes importantes. Por las  mañanas nos despertamos muy temprano. Vamos a los exámenes requeridos por el doctor.
Los días se tornan a veces fúnebres. A veces con esperanzas de creer que la salud es lo mejor, y el tiempo va acompañado de el. Nadie sabe que enfermedad padece hasta que vienen los síntomas arduos, e impredecibles. Ella sabe que las esperanzas son lo único que le queda. Que el apoyo de una hija con completa certeza de que la quiere, y se preocupa por ella hasta el mínimo detalle por sentirse cómoda y  hacerla sentir cómoda e importante, siempre, la acompañare hasta en los momentos más tiernos, más saludables, más desafortunados, más desleales, más suyos y más de ella. La veo, cuando tenía 16 años. Totalmente incólume. Totalmente llena de esperanza, junto anhelos siempre hechos, planes siempre pensados. La veo saliendo de su casa, todavía con el uniforme escolar, la veo caminando con una sonrisa marcada en el rostro, llevando consiguió paz, paz y nada más. Se siente tranquila, feliz, sabe que tiene todo para ser feliz, sabe que tiene esperanza, confianza, calma… calma. Esperando la oportunidad que tanto desea, el sueño de convertirse en pintora obstinada. Pintora ,llena de pasión por su trabajo.
He estado pensando tanto en su vida, estos días, examinando con minuciosidad cada detalle que la incorpora a sentirse toda una estrella de rock. Ella es una de mis personas favoritas en el mundo. Una persona que tiene tantas virtudes. Tanto potencial y tanta fe en sentirse ella, y nadie más.  Pienso en lo difícil y deteriorada que puede convertirse la vida con el pasar de los años. La salud en todas las formas posibles y el tiempo en todas las maneras posibles. Lo más valioso. Lo más relevante que puede haber.
El lunes por la mañana desayunamos en el Havana del larcomar. Conversamos mucho. Meditamos sobre la vida, intercambiamos pensamientos tanto suyos como míos. Al igual que mi padre en febrero, nosotras también tuvimos nuestro tiempo para estar juntas. Solas. Conversamos. Conocernos mucho más. Contarnos sobre nuestros sueños. Sobre nuestros anhelos. Sobre el tiempo de calidad. Sobre la vida.
Por la tarde fuimos a recoger su resonancia magnética. Sospechamos el resultado. Nos dimos un respiro. Nos miramos con complicidad y nos abrazamos. Le dije que todo iba a estar bien. Que tenía que pensar muy bien en la decisión que iva a tomar. Si era cirugía. O era esperar. La tediosa espera. El tiempo y las horas lo decidieran con ella.
Ahora ella descansa. Tiene que hacer reposo. No puede caminar mucho. Esperamos los días. Esperamos las horas. Esperamos a que los medicamentos que le dio el doctor, funcionen.
Ella desea que yo no esté enterrada mucho tiempo en el exilio. Dice que el aislamientos en exceso para los escritores son malos. Andar sin celular, andar sin el ipod, sin nada de nada. Es mucho más peligroso de lo que creo.
Trato de escucharla. Trato siempre de escucharla.
Mientras los días continúan pasando aquí en Lima, tratamos de acostúmbranos a las distancias, a estar sin carro, ella sin manejar, yo sin exilio.


martes, 18 de septiembre de 2012

Tecnicolor.



Días como hoy pienso, lo maravilloso y excelso que es darse cuenta, que la paciencia, el deber, la perseverancia, el dolor, hace que creamos más en nosotros mismos. Que descubramos quienes somos. Y que en metáfora somos como una planta.  
Soy como una planta. Miro a mí alrededor. Solo hay música. Solo estoy golpeando el teclado. Solo imagino lo que fue pasar esos días dolorosos. Como teniendo diecinueve años, la vida puede estar tan llena de experiencias, de aventuras, de situaciones improvisadas, que casi nunca fueron calculadas.
Días como hoy pienso que somos más que un simple perfil psicológico, una simple primera impresión, un estúpido prejuicio, un tonto estereotipo, un doloroso invierno. Nunca me gusto ser simplista con algo tan genial como son las: personas. Siempre pensé que tendría que estar con los ojos abiertos a todo. Especialmente con la gente.
Siempre me pareció interesante sentarme y estudiar la mirada de ese chico del bar del centro. Vacía, esperando, viendo el reloj, sonriendo cuando viene su novia. Siempre pensé en lo: únicos que somos. Qué no hay copias. Que no hay dobles hojas.
Tenemos la mismas ramas, pero las hojas florecen, cómo florecen tus valores, tus talentos todo en la primavera. Por otro lado el invierno es duro, es una época difícil, agazapados ante los problemas, gregarios cuando oímos el primer consejo que escuchamos. Hay una guerra fría que se acerca. Y viene la melancolía. El sin sazón. La tristeza quizá. Aún así nos mantenemos ante todo fuertes aunque las hojas, una por una, empiezan a caerse, sigilosamente, dolorosamente, cada una es dolorosa, con una somnolencia pesada. Amodorrada.
Las raíces siguen intactas, tu corazón todavía no se ha destrozado. Tu cerebro todavía no deja de producir sertralina, ellos, tus padres, todavía siguen allí cuando los necesitas. Llorar en sus brazos es como sentirte como una mano en guante, protegido.
Nunca dejes que ese invierno, tan triste, tan espeso, tan desolado, te derrumbe, cuando lo haga entonces serás como una planta cuando no se le echa agua, cuando no la proteges, cuando no la sacas al sol. Una  más, una criatura que no pudo más.
No te dejes derrumbar por esos momentos. Es solo un momento. Existe un mañana. Sobrevivirás. Por tan mala que sea la situación… sobrevivieras. Te pondrás derechito, miraras por encima del hombro, respiraras, y continuaras. No hay nada eterno. Lo malo siempre pasa… sobrevivirás. Serás valiente, miraras la vida con ojos distintos, descubrirás que tienes muchos lados, que puedes tener solidaridad, esperanza, alegría, frescura, seriedad, prudencia, coherencia. Tristeza, irritabilidad, egocentrismo, orgullo y prejuicio.
Hojas nuevas, con las mismas raíces. Porque las personas nunca cambiamos radicalmente. Podemos mejorar o empeorar.
Escucha el sonido de tu corazón. Aún late. Aún sigues respirando. Aún puedes sonreír, la vida nunca fue tan dura.
Alégrate, cuando veas que puedes un día más. Que Él te dio una oportunidad más. Una.
Por qué, según Heráclito: es imposible bañarse dos veces en el mismo rio. “Con el tiempo, una oportunidad perdida se pierde siempre”
Nunca sientas que fracasaste. Que tu vida es más que un solo: fracaso. Que no mereces vivir. Que la muerte es mejor. No te juzgues. Soporta, se fuerte. El valor de una vida no se mide por solo fracaso ni por un éxito aislado.
Charles Dickens dijo “Para todos sin prevenir nos espera la tragedia, la belleza y la felicidad no se pueden triunfar, solo debemos gozarlas”.
Disfruta los momentos preciosos. “Se optimista. Cuando el camino sea difícil, solo sonríe sonríe y se feliz”
Tecnicolor. Así eres tú. Con matices únicos, preciosos

martes, 7 de agosto de 2012

Don't Panic.


Eres maravillosa tal y como eres, eres brillante. Nunca pienses que no eres nada, porque lo eres todo, y todo es mi mundo. Acéptate, cree en nosotros. …¿Quieres ser escritora?, pues entonces hazlo. Eso me dijo mi padre en un tren en Rancagua. Conversamos largas horas, nunca lo sentí tan bien, nunca lo sentí tan positivo como ese día. Me tranquilizo y contagio su entusiasmo por seguir mis sueños descabellados… Gracias papá, eres fantástico.
Confianza frente a desconfianza: Es tu primera vez, tomando, fumando, probando lo “prohibido” estas con los ojos rojos, ellos no se dan cuenta mientes y les dices que estuviste llorando por terminar con tu ex chico. No lo hagas, respira, se sincero con ellos. No hay nadie mejor en el mundo que te pueda aconsejar tremendamente bien. Los amigos son los inexpertos, son unos novatos, cuéntales a tus padres lo que te sucede con prudencia, con audacia. Ellos no te mandaran al diablo a la primera, quizás sí… el final, es un consejo mucho mejor al que escuchaste de tu amigo. La voz de la experiencia y el amor te hablaran. Escúchalos.
Autonomía frente a duda y vergüenza: Ellos nunca permitirán que te equivoques y que sufras, al menos se equivocaran teniéndote en una caja de cristal, pero es porque te aman. Y te aman tanto que permiten que tengas tu autonomía y decidas por ti mismo. La vergüenza ya es lo tuyo. Acción: reacción. Si te equivocaste, fuiste desleal, molestoso, arrogante con los demás, llegara el momento en que sientas vergüenza con aquella persona con la que fuiste muy estúpido, por burlarte porque no sabía nada, la vida da tantas vueltas que estarás en su misma situación alguna vez en tu vida. Sentirás vergüenza, vergüenza de lo que hiciste. Aún así cuéntales a tus padres, pídeles un consejo. Retomando de nuevo a lo anterior ellos son los que te aman tanto que te darán un tip, un consejo mucho mejor al de tu amigo, así que habla con ellos, se amigo de tu padre y tu madre, créeme no hay mejor relación que esa.
Iniciativa frente a culpa: Fallas con tu ex, fallas con tu nueva pareja, fallas, das la iniciativa te crees el rey del mundo teniendo el control, el control… “todo está bajo control”. Das la iniciativa pero la iniciativa, es más que eso, es ser valiente, saber de tus capacidades y no, iniciativa en formar metas realistas y tenaces. Saber, dar el primer paso, caerte, volverte a levantar. La culpa es solo la consecuencia de tus actos. Sentirás culpa cuando hagas hecho algo mal, cuando rompas ese hilo de confianza que tenias con tus padres, amigos, conocidos, por ser desleal.
Laboriosidad frente a inferioridad: No eres fuerte, pero siéntete fuerte, no hay mejor fortaleza que la de uno mismo, cree en cosas sobrenaturales como Dios, pero no se lo dejes todo a él, es igual que la universidad el da el 30% y tu el 70%. Siente la satisfacción cuando hayas logrado una meta favorable y prometedora, pero sobretodo por aprender. No te sientas inferior aunque ellos te regañen por el 11 en matemáticas, en comunicación, o en la universidad estadística. No dudes de tu valía. Tu puedes, puedes más, déjalos con la duda, hazlos creer que todavía puedes dar algo mejor.
Cohesión de identidad frente a confusión de roles (la crisis de identidad): ¿Quién eres?, ¿De dónde vienes? ¿Para que estas en este mundo de porquería?, ¿por qué tuviste que nacer?, y lees a Sartre a en especial la nausea. Te fascina el existencialismo, porque estas más perdido, y más jodido que el titanic cuando se va a hundir. Pasa esa etapa con calma, no te preocupes mucho. Responde esas preguntas que retumbas tu cabeza, como un bichito tenaz. Respóndelas buscando respuestas racionales. Siéntete tranquilo, todo esto es normal, es una etapa, como las demás. Confía de nuevo en ellos, refúgiate en libros, siente tranquilo que pasará. Nada es eterno.
Intimidad frente aislamiento: Si necesitas un tiempo para ti, tómatelo, es decisión tuya, si quieres estar en el exilio para resolver asuntos personales, hazlo. El tiempo es tiempo, y el tiempo tú lo haces. Estable relaciones intimas con personas que sabes que valen por su forma de pensar, por sus sentimientos sencillos, amables solidarios. No te juntes con gente problemática, siempre arrochan a una. Sé respetuoso con ellos, pero mantelos a un buen margen de ti. No te sientas solo, porque piensas que eres distinto y que no hay semejantes a ti, no te sientas un lobo en una manada, tú eres tú, cree en ti, no te sientas siempre en el exilio, nunca ayuda, te encerraras en tu mismo y en tu arrogancia.
Generatividad frente a estancamiento: Mejora el mundo empezando por ti, mejora el mundo ayudando a los que necesitan tu ayuda, nunca niegues un apoyo, no le ganas al mundo, esa es una bobería barata, es un cuento mal hecho, tu nunca le podrás ganar al mundo, pero si puedes  encajar, puedes sentirte bien con  la sociedad que te rodea. No te estanques en un solo punto. No trates de correr, no trates de vivir experiencias que no están de acuerdo a tu edad tanto así sea cronológica, no lo hagas, la mayoría de veces serán malas lecciones.
Integridad de ti mismo frente a desesperación: Busca un punto, busca sentirte bien, busca ayuda si la necesitas, confía cree que puedes ser mejor, eres fantástico, eres un diamante en bruto, eres una joya por descubrir, busca la armonía en ti, busca el punto medio perfecto para ti. No te desesperes si sientes que estás perdido, que no encajas, que no puedes más y caigas al hoyo de la depresión, si eso sucede tranquilízate, busca ayuda, gánale a tus demonios. Tú eres más inteligente que ellos.